De acuerdo con información de varios portales especialistas en vehículos de ocasión y en datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), más de 269.000 vehículos en Canarias, que representan el 22% del parque automotor de la región, serían afectados por estas nuevas limitaciones.
En el contexto actual, las islas ya aplican restricciones a los vehículos que no poseen distintivo medioambiental. La adición de nuevas limitaciones a los coches con etiqueta B ampliaría considerablemente el espectro de vehículos afectados, llegando casi a la mitad del total de más de 1,2 millones de turismos en Canarias.
La implementación de estas medidas se enmarca dentro de los esfuerzos para cumplir con la Ley de Cambio Climático y debería llevarse a cabo en nueve ciudades principales de Canarias, impactando a más de un millón de personas, aproximadamente el 54% de la población del territorio insular.
A nivel nacional, las ZBE afectarán a 149 municipios, en los que residen más de 25 millones de personas, o el 53% de la población española, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Actualmente, y considerando tanto las restricciones existentes para vehículos sin distintivo como las futuras para aquellos con etiqueta B, el 59% de los turismos en España vería limitada su capacidad de circulación en las áreas de bajas emisiones.
Algunos especialistas señala que estas nuevas restricciones configuran un escenario donde "seis de cada diez coches en nuestro país tendrán limitaciones de circulación en las grandes ciudades, lo que plantea una España a dos 'emisiones'". Se describe un futuro donde las ciudades más grandes estarán dominadas por vehículos electrificados con libertad de circulación, mientras que en ciudades más pequeñas y zonas rurales, los vehículos más contaminantes podrán seguir circulando sin restricciones.
Santa Cruz de Tenerife la más afectada de Canarias
En Santa Cruz de Tenerife, la futura ZBE, cuya implementación está prevista para finales de año tras una prórroga solicitada por el Ayuntamiento, cubrirá todo el centro de la capital. Esta zona, donde residen 16.369 personas y se ubican más de 5.000 plazas de aparcamiento entre públicos y privados, verá su superficie triplicada respecto a la actual zona Urban, pasando de 226.697 metros cuadrados a 778.244 metros cuadrados.
En La Laguna, también se están tomando medidas preparativas con la creación de una comisión interdepartamental que incluye a técnicos y concejales responsables de áreas relacionadas con las ZBE. Esta comisión está trabajando en la delimitación de las zonas que se verán afectadas, que inicialmente incluirán el casco histórico, Camino La Villa y el entorno de San Honorato.
Estas iniciativas reflejan un esfuerzo significativo por parte de las autoridades locales para adaptarse a las exigencias medioambientales y contribuir a la reducción de la contaminación.
Sin embargo, también plantean desafíos significativos, tanto en la logística de su implementación como en el impacto que tendrán en la vida diaria de los residentes y la economía local en Canarias. La transición hacia una movilidad más sostenible es crucial en el contexto del cambio climático, pero requiere una planificación cuidadosa y una consideración equilibrada de todos los factores involucrados.