Una alumna de una clase de arte ha perdido ocho dedos de sus manos después de poner las mismas en yeso, como consecuencia ha sufrido quemaduras terribles por un error cometido en la clase. La joven de 19 años introdujo sus menos en un yeso líquido cuando rápidamente se asentó alrededor de su piel, creando temperaturas de hasta 60°C.
Los compañeros de clase frenéticos y su maestra intentaron desesperadamente cortar el yeso con martillos y cualquier herramientas que encontraron sin casi conseguir nada, sin conseguir resultados decidieron llevarla de urgencia al hospital con las manos atrapadas en el bloque totalmente solidificado.
Los médicos usaron un taladro neumático para liberarla, pero el daño de las quemaduras fue tan grave que los cirujanos tuvieron que quitarle todos los dedos de la mano izquierda y tres de la otra. La joven pasó tres meses en el hospital y su cuerpo está cubierto de cicatrices de donde le tomaron los injertos de piel.
El terrible suceso ocurrió después de que la joven «malentendió» las instrucciones de su profesor de arte. Pero la escuela fue sancionada con 16.500 libras esterlinas después de que admitió haber infringido las leyes de salud y seguridad.